domingo, 23 de marzo de 2008

Semana Santa lorquiana

Bueno, pasó nuestra semana santa-criolla-de turismo en el Solís. Para el espectáculo fue importante. Personalmente me sirvió para ver las posibilidades que el Solís tiene, para trabajar con Osvaldo, Soledad, Juanjo y Pablo en el espectáculo en su dimensión real. Con Martín, por lo menos vimos el Pasodoble y sus posibilidades escénicas para la Fiesta de Boda, se bajó del avión y vino al Solís (grande Martín!). A los actores creo que les sirvió para probar cosas nuevas y sentir esta Bodas en el espacio para el que está siendo creada. Hay cosas que me gustan mucho cómo están quedando. Hay mucho para trabajar. Me sigue resultando surreal (nunca mejor empleado) los momentos de ensayo en los que estamos montando o probando algo y se escuchan las cámaras de las visitas guiadas. Pero el viernes o el sábado, fue mágico que justo en una de las escenas que más me gustan por cómo quedó montada, la tertulia alta estuviera llena de turistas con cámaras, y sentir que disparaban sus fotos en un extraño clima. También entramos en la esperada "meseta" como me dijo alguien sabio del elenco, es decir enfrentarnos a las dificultades reales que un proceso tan grande y complejo como Bodas tiene. Ánimo elenco!. Lo lograremos. Semana que viene arranca montaje del tercer acto. El final del espectáculo. Nos mudamos al Teatro Victoria.

No hay comentarios: